domingo, 15 de marzo de 2009

Gente sencilla


Gente sencilla

Mi entrega es total. De inicio al final

Mis manos llegaron a tocar la fugaz ascensión de la certeza,
un rayo de memoria con sonrisa
reflejado en el éxtasis de las palabras. Mi entrega
se ríe como se ríe el recuerdo maduro
de secretos callados con el solemne canto
que florece en rosas blancas
con el viento de la cosecha danzando
y besando los frutos de la vida.

Mis ojos llegaron a tocar la fugaz ascensión de la belleza,
un silencio extraviado con sonrisa
en el espejo del presente de viento suave. Mi entrega
se ríe como se ríe el grito de reclamo
que fluye en la comunión
de sueños desgranados
con fiebre de vacíos rompiendo
juguetes de pasado.

Mi entrega es total…
sólo queda la ausencia
del arco y la flecha con voz
de preguntas sin respuestas
con tibias copas de largo olvido.

De inicio al final una máscara vive
en las mismas aguas de la gente sencilla.


Copyright ©
DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS
Ricardo Serna G

Dos gotas de agua y paciencia


Dos gotas de agua y paciencia

Escribiré con mis venas en la carta del olvido.
Pintando con dos gotas de agua el dolor de mis días,
los enfrentaré por las sombras del recuerdo
del lecho de los besos sin estrellas.
Navegaré por los mares de la paciencia
dando vueltas en torno a las preguntas,
debajo de las rosas de palabras calladas
con el vapor de vino suave de la luna.
Alejaré la mirada de los nombres
con angustia descifrando la amargura,
y haré dos labios cruzando
calcinados en los restos
de los sueños ciegos.


Copyright ©
DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS
Ricardo Serna G

Como si


Como si


Como si las fuerzas amarraras
emborrachándolas de tristeza
y a la distancia con miedo
recorrieras las aguas de la existencia;
como si las manos quisieras
dejar sin esperanza en voz de principio
con sed de todo mío
y regresaras a las plegarias
dejando la soledad como enemiga;
como si la palabra bañaras
de cansancio y suspiros,
y la sepultura fuera
la noche de despedida;
como si el alma arrodillaras
con cobijas de realidades
y el fuego empuñara
el alma de la desdicha;
como si nada fuera cierto
y la muerte sólo un sueño,
y repartieras el silencio
como premio de las virtudes.


Copyright ©
DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS
Ricardo Serna G

“El hombre light”


“El hombre light”


Así ha surgido a la mitad de la distancia
el superficial momento sin convicciones,
el ligero caminar en pesados vuelos
con su trivial aleteo de mosca
sin deseo de compromiso;
el silencio del conocimiento,
débil pensamiento que oculta
la garganta de lo eterno
y destruye las humildes alas de la ternura;
así ha surgido con las palabras mágicas
de objeto, repleto de consumo
con un despertar de admiración y envidia;
con un frívolo hueco en su pecho
y un enorme dolor en su dinero.
Así, con sangre de canto nuevo,
con sufrimiento trascendental, el “hombre light”
despertará de su letargo.

Copyright ©
DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS
Ricardo Serna G

La alcoba también sueña


La alcoba también sueña


Y en la desgracia la alcoba también sueña
Y cree en la luz de la feria de la noche
Y soñolienta deshoja el alma triste
Y con espinas muerde la flor del mañana
Y por fuera a solas
Y por dentro con ojos de ángel
Y gime con boca de carne
Y ojos de gloria
Y disfruta la danza
Que la desviste.

Copyright ©
DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS
Ricardo Serna G

Sombras


Sombras

Se quiebran con máscara de viaje: presienten
que los huesos tienen viuda sin destino
única y vacía entre los cimientos,
vida sin manos, sin olor de espera;
con el sol castrado donde duele,
con palomas ciegas
y semillas en la siembra de lo oscuro.

Llegan con vientre sin voz
a la casa sin escudo; se quiebran
con el llanto a mediodía,
con el rebaño dormido,
con la libertad herida
y la piedra carcomiendo el río
de la esperanza.

Presienten, con latido agónico,
que las ruedas del tiempo
son imágenes de su sangre
-sombras a distancia muerta
que se riega con pies de prisionero-,
luces de soledad debajo de lo amargo
creciendo en el polvo.

Piel de fiebre con disfraz de humano
entre agujas de luz y tumba
y el tormento de parálisis ingobernable; se quiebran
en racimos de instantes
a lo largo de los sueños, silencio;
y sin nombre, devuelven a la tierra
el mismo despertar del espejo.

Copyright ©
DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS
Ricardo Serna G

Cómo manejar la crisis financiera


Como manejar la crisis financiera


Cómo manejar la crisis financiera, admito, que es
parte de mi pensamiento,
que soy esfuerzo embestido de ruido,
fluvial parálisis de adúltero bautismo
y besuqueo de billetes sin color;
un des-nombrado gusto por hacer
presupuestos golpeadores
y cobrar religiosamente sin aburrimiento
el hambre que ladra
todos los días;
un vuelo a la tierra de nunca jamás
donde se pisan las heridas con preguntas sin respuesta,
donde los ojos de pan ausente
llaman al enemigo que resucite
con máscaras de cordero
y dé cobertura a los condenados conjuros
de incienso que hacen dormir
las antorchas del espejo;
una boca con plural ensueño
que en hospitales aúlla y se somete
a la flor de las lágrimas
desterradas de la matriz del progreso.

Copyright ©
DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS
Ricardo Serna G

Te veo



Te veo

Te veo entre nubes
como instantes que fueron nuestros, y cantos
que pisaron las espinas
haciendo florecer el amor;
te miro entre soledad y deseo
- espejos tuyos y míos-, y sueños
que separaron la oscuridad de la luz
donde las heridas fueron cubiertas
con el vaso pasajero del dolor
y huésped místico donde
las palabras abiertas sienten
la sangre sedienta pronunciada
con letras que anidan la imagen deshojada, y caminos
que cubrieron las llamas
en vuelos con voz de alegría;
te siento en el viento
como hoja y agua
haciendo del polvo caricia,
un pasajero aprendiz de la vida donde
el tiempo es sombra disfrazada de canción
y vestido de belleza, y sonidos
que hicieron fuente de las sonrisas
donde la gracia es sentencia
de paz y felicidad;
te nombro en mi alma
-recuerdo o pensamiento-, y duelo
que amarró los lugares y mi cuerpo
con presencia de superficie de río
temblando y gimiendo
en la corriente escapando al mar donde
golpe y sentimiento aprendieron
a brillar libres
en la quietud y la distancia.

Copyright ©
DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS
Ricardo Serna G

Y me descubro



Y me descubro

Y me descubro recordando las horas
-en silencio- con sábanas blancas,
con huecos de dolor, y ruinas
-dulzura en agonía-;

La lámpara que ilumina el frutero
escondido -peso del anhelo-
disfrazado de lluvia,
de costumbre,
vacío con teclas de miseria
y esqueletos reflejados en ausencias;

la voz que escapa entre las sombras
vertidas -sentimientos sin amaneceres-;
y después, qué tristeza
--náufrago encendiendo las cuitas en la orilla
sin curarse las llagas del corazón.

Y nada será igual, se anudará todo
entre mis ojos, en las paredes de los pensamientos
fabricando miradas inútiles –inseguras-
que queman las máscaras de las antorchas nubladas
con caderas condenadas al grito entre-dormido
y a las puertas que dejarán los nombres
encima del come-tiempo en espiral lamento.

Copyright ©
DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS
Ricardo Serna G

Viajeros


Viajeros

Ellos son viajeros con sueños de oro que miran
los lugares escuchando la belleza.
Por las noches la tierra se convierte en cielo
y duermen descubriendo sus secretos;
escuchan las playas de la ternura
con el silencio vestido de iglesia,
con el hambre de nostalgia y su verdadero siempre.

En su caja de extraños anónimos
el nunca está despierto
y el tiempo olvidado es tren de regreso.

Las mareas se despiertan
en tormentos con billetes de lotería
premiados
y se sumergen en el corazón de su adolescencia
llevando las ventanas abiertas
con fresco flotando las sonrisas
en banderas amorosas.

Escuchan los momentos con el sabor
de los abrazos,
con el sabor de los regalos
descubriéndose con párpados azules
y las estaciones llorando de alegría.

Viajeros con el aire esperanza,
guerreros alados en plenitud
con las bestias desplumadas
escuchando la copa de la distancia rota.


Copyright ©
DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS
Ricardo Serna G

Vivo y muero



Vivo y muero

Cuando la tristeza nos la prestan,
cuando la luz se asfixia,
cuando la lengua está amarrada,
cuando hervimos con sus ojos amargos,
cuando el ruido, cuando aullamos
de la limosna de su llanto.

Vivo con su herida,
con la rigidez del sufrimiento,
y muero del tiempo,
de la desventura,
del dolor que es caldo en su boca,
del poema escrito con versos de sangre.

Vivo del regreso del viento,
de los ojos en cobijas de espanto,
y muero de la desolación,
de melancolía
dibujada en la palabra muerta,
del poema escrito con versos de hambre.

Vivo con la mano cerrada,
del impulso de mi ceguera
y muero en el insomnio,
en el vacío
con gritos que se consumen,
del poema escrito con versos sin memoria.


Copyright ©
DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS
Ricardo Serna G